Jeremy Lin: Una Reflexión Personal
David Brooks de la revista New York Times escribió un artículo en ingles cuyo título “The Jeremy Lin Problem” o “El Problema Con Jeremy Lin”. En su artículo, Brooks hablo de una anomalía en el Sr. Lin.
Brooks decía que lo veía anormal un graduado de Harvard, asiático-estadounidense, y creyente en Dios jugando baloncesto o cualquier deporte.
Brooks continúo sus ataques hablando de la incompatibilidad de esas características con los de un atleta. Este “individuo” dio como razón de que los creyentes son humildes y los atletas son los opuestos.
Hemos visto atletas como Tim Tebow, Kaká, y otros con creencia en Dios o cualquier religión dando ejemplo de humildad en una época de materialismo y cultura de muerte.
Lo contrario son aquellos [tanto la izquierda, derecha, o independientes] que no creen en Dios y terminan haciendo papel de un Dios. Jeremy Lin [como cualquier atleta] puede ser creyente o mostrar sus creencias y jugar deportes como baloncesto, futbol, o beisbol.
Los deportes son universales para los creyentes y los no creyentes. Quiero abarcar el tema de la etnia y el profesionalismo a raíz de lo que sucedió con ESPN.
Considero que los ataques contra Jeremy Lin [además de base anti religioso] son a base de racismo y envidia. Parece mentira que ciertos elementos de la prensa occidental liberal hablan de tolerancia y libertad sin practicarlo.
No invade que los lectores poco a poco abandonan a la prensa tradicional y cansona debido a la hipocresía. Considero que Jeremy Lin merece todos los elogios del mundo por sus logros.