Parece que Jose Mourinho – Entrenador de Chelsea no tendra castigo por sus palabras contra la ex doctora del equipo Eva Carneiro. Es un acto de hipocresia condenar racismo y sexismo en casa ajena sin hacer autoanalisis.
Tampoco ayudara futuros profesionales medicos deportistas con deseos de trabajar en la Liga Inglesa. Ojala si la situacion logra resolverse sin la necesidad de una novela.