Dejaré de leerte porque aunque no lo creas no es saludable para ninguno de los dos. Espero que seas tan feliz como te lo mereces. Recuerda que un día te advertí que sólo sé hacer daño y lamentablemente aún sigo teniendo esa maldición. By: Ana Carranza.
a través de Dejaré de leerte. — Diario de una Dama
