Si supiera conjurar las palabras mágicas pa que te enamoraras de mí…
Si pudiera hilar los versos del alma pa tejerte la poesía más bonita del mundo pa que me quisieras (como yo te quiero a ti, aunque aún no lo sepas)…
Si hallara un argumento vehementemente convincente pa desarmar tu aparentemente inquebrantable armadura de acero inolvidable…
Puede que la respuesta esté cerca aunque no la vea y me muerda la punta de los dedos. Quizás esté entre mis renglones torcidos, o tal vez en las palmas de tus manos; o que sea tan sencillo como accionar el resorte correcto.
Si me quisieras qué distinto sería todo. Si tú quisieras… Si yo me diera la oportunidad… Si te quisiera un poco menos y me quisiera un poco más…
Aunque quizás nunca lo sabrás…
Mayo 2021